Derramar el té sobre el té: qué tipos debería beber más y por qué

 

Un artículo científicamente cargado sobre la calificación de salud de diferentes tés, con consejos basados ​​en evidencia sobre cómo obtener los mejores beneficios

Comola bebida más popular y saludable después del agua, el té se ha establecido durante mucho tiempo como un elemento básico en las rutinas de muchos, con personas de diferentes culturas y orígenes con un promedio increíble de 2,16 mil millones de tazas por día.

Se remonta al siglo III d.C., el consumo de té a menudo se promociona por su valor medicinal y la variedad de efectos secundarios impresionantes dentro del cuerpo, y con más de 20,000 tés diferentes para elegir, ¡es difícil equivocarse!

Sin embargo, cuando se trata de elegir su té en función de los beneficios que tiene para ofrecer, hay algunas cosas clave a tener en cuenta. Este artículo está aquí para desglosarlo.

Tés Blanco Y Verde

Técnicamente hablando, solo los tés negro, verde, blanco y oolong se derivan en realidad de Camellia sinensis, también conocida como la planta del té. Los 'tés' de hierbas, por otro lado, se derivan precisamente de cualquier planta aparte de la planta del té. Bastante interesante, si me preguntas.

De los tés más puros, el blanco y el verde se procesan de manera más mínima y se elaboran utilizando los brotes inmaduros de la planta del té o las hojas más maduras, respectivamente. La razón por la que es importante tener en cuenta esta información es que cuanto más procesadas están las hojas de té, los niveles más bajos de flavonoides polifenólicos (es decir, las cosas buenas) suelen contener.

Los flavonoides son un tipo de antioxidante, el más potente de los cuales, conocido como ECGC, se encuentra principalmente en el té verde y se ha relacionado ampliamente con la prevención del cáncer, la aterosclerosis y la diabetes tipo 2 (1). Los antioxidantes actúan dentro del cuerpo al unirse a los radicales libres, que son las moléculas responsables de las mutaciones dentro del cuerpo que pueden conducir al desarrollo de enfermedades. El ser humano promedio acumulará daño en el ADN como resultado de estos radicales libres en aproximadamente el 7% de sus células totales, un proceso que los antioxidantes ayudan a mitigar directamente.

Además, el consumo regular de té verde se ha relacionado con una reducción del riesgo de una lista increíblemente larga de problemas de salud, que van desde la obesidad y el cáncer de ovario hasta el deterioro cognitivo, los accidentes cerebrovasculares, la oxidación del colesterol LDL y muchos, muchos más (2, 3, 4). ). Con la aparición de evidencia reciente que sugiere que la capacidad del té verde para proporcionar hidratación al cuerpo está a la par con la del agua potable, podría ser la sustancia más saludable que puede incorporar a su rutina diaria (5).

Dicho esto, si eres alguien a quien le gusta beber té con limón , el té blanco de repente salta adelante en el ranking con más que ofrecer. Debido a la disminución del pH que se produce como resultado de la fruta cítrica, se puede liberar una cantidad significativamente mayor de fitonutrientes en comparación con el té verde, tanto con la adición de limón como sin ella.

De hecho, se descubrió que el té blanco (con limón) bloquea el 100% del daño del ADN de los estudios in vitro del carcinógeno PhIP, mientras que el té verde solo pudo bloquear una fracción de la misma cantidad (6).

Oolong y té negro

El té Oolong se crea primero permitiendo que las hojas de té se oxiden y oscurezcan parcialmente a través de la exposición al aire, mientras que la elaboración del té negro implica un proceso de oxidación más completo, proporcionando a los bebedores un sabor ligeramente más fuerte, como resultado. Aunque más procesados ​​que sus contrapartes blanco y verde, los tés oolong y negro todavía tienen mucho que ofrecer en lo que respecta a las bebidas.

Los tipos de té negro incluyen Darjeeling, Earl Grey, masala chai, té de desayuno inglés, así como la mayoría de los tés instantáneos y perfumados. Los tés negros son ricos en antioxidantes, y las investigaciones sugieren que el consumo puede ayudar a prevenir el daño pulmonar como resultado del estrés oxidativo causado por fumar (7).

Los tés negros también cuentan con el mayor contenido de cafeína de los tés, lo que no solo nos ayuda a combatir la fatiga, sino que también es responsable de la producción desenfrenada de ondas alfa en el cerebro. Esta afluencia de actividad cerebral alfa es lo que contribuye al estado de 'alerta pero relajado' que podemos experimentar mientras bebemos té, incluso solo unos minutos después de tomar ese primer sorbo (8).

Sin embargo, cuando se trata de apoyar los objetivos de pérdida de peso y mejorar el metabolismo, la investigación sugiere que el té oolong puede ser el mejor de todos. A pesar de contener solo alrededor de la mitad de la cafeína que el té verde, en comparación, se cree que la alta concentración de polifenoles polimerizados en el té oolong es lo que promueve sus efectos para quemar grasa y reducir el colesterol, entre otros (9,10).

Infusiones de hierbas

Esta categoría de tés abarca desde té de menta hasta cúrcuma y rosa, con una variedad de beneficios para la salud que varían casi en la misma medida que la gama de sabores disponibles.

En 2009, un grupo de investigadores se propuso medir el contenido de flavonoides (y por lo tanto la actividad antioxidante) de más de 14 tés de hierbas diferentes, incluidos hinojo, manzanilla, diente de león, hierba de limón, rooibos, bergamota, menta piperita, tomillo, espino, hierba luisa, jazmín, romero, escaramujo y lavanda.

Los cinco primeros clasificados como los más altos después del experimento fueron manzanilla, diente de león, hierba de limón, rooibos y rosa mosqueta (11). Es importante tener en cuenta que la maceración durante más de 60 segundos no pareció tener un efecto significativo en el nivel de flavonoides disponibles en el té, por lo que es únicamente una cuestión de preferencia de gusto personal.

Manzanilla: el té de manzanilla no solo se puede usar en el tratamiento de la ansiedad y el insomnio, sino que también funciona extremadamente bien como un agente antiinflamatorio; de hecho, los estudios sugieren que las mujeres embarazadas deben evitarlo de la misma manera que los medicamentos como como la aspirina (12).

Diente de león: de todos estos tés probados, el té de diente de león fue clasificado como el más alto en actividad antioxidante dentro del cuerpo. Debido a la presencia de estos componentes bioactivos, este té es más conocido por sus propiedades antidiabéticas en el tratamiento de pacientes con diabetes tipo 2 (13).

Hierba de limón - De manera fascinante, el té de hierba de limón se ha observado dentro del mundo académico por su uso en la prevención de la anemia, como resultado de sus efectos estimulantes de la eritropoyesis, es decir, un aumento en la producción de hemoglobina y glóbulos rojos (14).

Rooibos: también conocido como té rojo, se cree que el rooibus desempeña un papel en la prevención del cáncer, lo que lo convierte en un maravilloso sustituto nocturno del té verde sin cafeína (15).

Escaramujo: involucrado en la investigación sobre la artritis reumatoide, se ha demostrado que el té de rosa mosqueta actúa como un antiinflamatorio, al mismo tiempo que proporciona una variedad de beneficios para el sistema inmunológico y la piel debido a la alta concentración de vitamina C en los frutos de este planta (16)

Para decirlo simple y llanamente, todavía hay muchas cosas que no sabemos sobre los mecanismos detrás de los efectos positivos de beber té, ¡pero sí sabemos que están ahí!

Debido a que todos los tés poseen características curativas impresionantes, son un medio maravilloso para apoyar la salud en curso y prevenir enfermedades en nuestro día a día. Lo que esto significa es que el té más saludable es probablemente el que estás dispuesto a beber más, y si eso no es algo para alegrar una taza de té humeante, ¡entonces no sé qué es!

fuente: Alexandra Walker-Jones - enero de 2021

Referencias de texto:

1. Wolfram, S. (2007). Efectos del té verde y EGCG sobre la salud cardiovascular y metabólica. Revista del Colegio Americano de Nutrición , 26 (4), 373S-388S.
2. Basu, A. y Lucas, EA (2007). Mecanismos y efectos del té verde sobre la salud cardiovascular. Reseñas de nutrición , 65 (8), 361–375.
3. Serafini, M., Del Rio, D., Yao, DND, Bettuzzi, S. y Peluso, I. (2011). Beneficios para la salud del té. En medicina herbaria: aspectos biomoleculares y clínicos. 2ª edición . CRC Press / Taylor & Francis.
4. Khan, N. y Mukhtar, H. (2013). Té y salud: estudios en humanos. Diseño farmacéutico actual , 19 (34), 6141–6147.
5. Ruxton CH, Hart VA. El té negro no es significativamente diferente del agua en el mantenimiento de la hidratación normal en sujetos humanos: resultados de un ensayo controlado aleatorio. Br J Nutr. 2011 agosto; 106 (4): 588–95.
6. Green RJ, Murphy AS, Schulz B, Watkins BA, Ferruzzi MG. Las formulaciones de té comunes modulan la recuperación digestiva in vitro de las catequinas del té verde. Mol Nutr Food Res. Septiembre de 2007; 51 (9): 1152–62.
7. Banerjee, S., Maity, P., Mukherjee, S., Sil, AK, Panda, K., Chattopadhyay, D. y Chatterjee, IB (2007). El té negro previene la apoptosis inducida por el humo del cigarrillo y el daño pulmonar. Revista de inflamación (Londres, Inglaterra) , 4 , 3.
8. Nobre, AC, Rao, A. y Owen, GN (2008). L-teanina, un componente natural del té y su efecto sobre el estado mental. Revista de nutrición clínica de Asia Pacífico , 17 .
9. Rumpler, W., Seale, J., Clevidence, B., Judd, J., Wiley, E., Yamamoto, S.,… y Hosoda, K. (2001). El té Oolong aumenta la tasa metabólica y la oxidación de grasas en los hombres. The Journal of Nutrition , 131 (11), 2848-2852.
10. El té Komatsu T, Nakamori M, Komatsu K, Hosoda K, Okamura M, Toyama K, Ishikura Y, Sakai T, Kunii D, Yamamoto S. Oolong aumenta el metabolismo energético en las mujeres japonesas. J Med Invest. Agosto de 2003; 50 (3–4): 170–5. PMID: 13678386.
11. KM Yoo, IK Hwang y B. Moon. Contenido comparativo de flavonoides de hierbas seleccionadas y asociaciones de su actividad captadora de radicales con acciones antiproliferativas en células V79-4. J. Food Sci., 74 (6): 419, 2009.
12. Srivastava JK, Shankar E, Gupta S. Manzanilla: una medicina herbal del pasado con un futuro brillante. Informe Mol Med. 2010 1 de noviembre; 3 (6): 895–901.
13. Wirngo, FE, Lambert, MN y Jeppesen, PB (2016). Los efectos fisiológicos del diente de león (Taraxacum officinale) en la diabetes tipo 2. La revisión de los estudios sobre la diabetes: RDS , 13 (2-3), 113-131.
14. Ekpenyong, CE, Daniel, NE y Antai, AB (2015). Componentes naturales bioactivos del té de limoncillo y efectos estimulantes de la eritropoyesis: uso potencial en la prevención y el tratamiento de la anemia. Revista de alimentos medicinales , 18 (1), 118-127.
15. Erickson, L. (2003). Té de rooibos: investigación de propiedades antioxidantes y antimutagénicas. HerbalGram , 59 , 34–45.